Viaje a Granada, por alusiones (I) - #LiaAndCheivisenGraná

Pues mira tú por donde, cuando menos imaginaba yo que ésta entrada fuera a salir a la luz y cuando más claro tenía que estaba destinada a quedarse en el baúl de "Debería haber hecho y no hice"... va una seguidora de Twitter y me menciona junto a @liacice, provocando un remordimiento de conciencia con este resultado.

¿Cómo empezó todo? Pues a ver... empezar, empezar lleva años empezado porque a mis taitantos no conocía Granada y... ya se sabe ... "Dale limosna mujer, que no hay nada como la pena de ser ciego en Granada" (Doy fe). Vamos que ganas había y muchas, tantas... que ahora me he quedado sin el run - run del tengo que ir. Luego va TVE1 y nos planta como serie del año Isabel, y claro no se olvida de la Reconquista, y yo que presuponía que no iba haber vacaciones (no me equivocaba) voy y despierto mi run - run y una que es muy tuitera pues allá que va y dice: "¿Quien se viene a Granada?"  y ¡pum!, mi @liacice que también se lanza: "Yo, yo..", pobre... se pensaba que iba de farol cómo cuando me da por decir que tengo que ir a Dubai o Malta (por cierto, tengo que ir) pero ¡no!, esta vez sola o acompañada, YO me iba a Granada, ¡vamos que me iba! (Que visitar esa ciudad tan bella, no lo retrasaba más ¡qué no!)
Líacice se lanzó a la piscina y durante el verano fui ganando terreno... que si hoy miro los hoteles, que si mañana cómo podríamos ir, porque hay que reconocer que está a una tiradita de Castilla ¿eh?, vamos a tal distancia que no me hubiera extrañado que la Isabel hubiera resucitado en su último viaje porque tiempo tuvo de largo. Bueno, a lo nuestro, que me disperso y al final no os cuento lo importante. Nos alojamos en "Hotel Monjas del Carmen", que por cierto, ¡vaya buen tino! (céntrico, buen servicio, y limpio) y llegó la fecha y allá que nos plantamos, no sin antes tener nuestras aventuras viajeras que son las que dan salsa a la vie.

Siete de la mañana suena el despertador, es el puente del Pilar, no quieres madrugar pero sabes que Granadate  espera, así que con ojos legañosos y sin muchas ganas de conversación nos encontramos en la estación de tren (primer medio de transporte que usamos). Pocos minutos después, ya despejadas por el chu -cu - chu decidimos que todo esto había que tuitearlo y Liacice creó el hashtag que tanto juego dio:  #LiaAndCheivisenGraná, porque nosotras otra cosa no, pero si algo nos caracteriza es la tecnología, la nube y su gran mundo. Es lo que nos ha unido al  participar en muchos proyectos de nuestra biblioteca, que nos tiene de conejitos de India, hoy nos dicen que nos abramos twitter, mañana que usemos una plataforma de lectura, pasado... y ahí vamos las dos ¡de cabeza! Total que de esos lodos, estos yodos.

Llegada a la city media hora después, tiempo justo para despejarse, taxi y rumbo estación de autobuses. En nuestra capital de provincia las estaciones están de punta a punta; ¡se preocupan por nuestra salud! y si pierdes el tren corres y corres para coger el bus y es como si entraras en bucle. ¡Por fin! ya estamos en el bus express, ese que nos lleva a la capital del reino y que NO tiene que parar para que nosotras podamos hacer el checking a tiempo pero que en esta ocasión hace una parada porque un pasajero se tiene que medicinar, momento en el que yo pongo cara de...
Esta exactamente:


Yo que iba relaxing, que el tiempo estaba calculado al milímetro, que miro el reloj, hago cuentas, supongo que con el tráfico se retrasa otros diez minutos y, justo en ese momento mi compañera de andanzas me comenta que una amiga suya que trabaja en el aeropuerto asegura ante el Tribunal de la Haya, si hace falta, que si tenemos que parar a hacer el checking y pasar controles no cogemos el aeroplano a la hora estipulada. Pongo cara de: ¡Nooooo! pero, a grandes males grandes remedios. Yo que no sé que son los códigos QR esos

pero si sé que sirven para pasar controles de aeropuertos rápidamente, y que soy de las que piensan que  "quien no arriesga no gana y que, de perdidas al río, así que nos lanzamos a ello, no sin antes unos cuantos ¡ay, no sé! ¿será así? y descargarnos todo lo descargarble incluido lector de QR porque si hay Chicas TIC esas somos nosotras.


¡Hum! y primer control:
-  "Uum, ¡hola! (timidamente) Tenemos código QR" 
- A ver.., pasa
Nueva aventura. No me paran porque he hecho el checking modernamente, que además era lo previsible, pero sí porque olvidé quitarme el reloj. Piiii. Cacheo. En fin..., prueba superada. Siguiente. Andar, andar, andar, sube, baja, derecha, andar, andar, gira y allí, casi ya  en Granada, calculo yo, estaba la puerta de embarque, al otro lado, en sentido contrario la zona de restauración. Allá en la más absoluta lejanía. Son las 12.30 p.m. y ni un café, ni un snack, nada de nada de nada. Mirada fija a la pantalla, quedan 45 minutos para embarcar, 30, 15, abren y de nuevo cara de ¿seguro que esto de los QR funciona? Cola kilométrica y una azafata libre, allá que vamos las dos: 
- Oye, mira que tenemos...
- ¡Ah! ¿Y estáis haciendo cola? Dejadme el teléfono: pi, pi. Pasad. 
¡Alehop!  Por fin, en el avión:



Pero...aunque la cosa mal, mal no iba, largo se nos empezaba a hacer, debía ser por eso del gusanito que todos tenemos en el estómago que se despierta a determinadas horas. Yo no veía el momento de meterme una caña y un pincho p'al cuerpo, que yo si me tengo que meter en el papel del tapeo desde que llego al aeropuerto, me meto ¡oiga usted! 

El vuelo salió con retraso al igual que el autobús que nos llevó al centro de la ciudad, mi compañera de viaje se dedicó a observar, yo en cuanto el avión despegó me senté en las nubes y soñé, soñé tanto que casi sin darme cuenta estaba pisando tierra granadina pero volví a la realidad cuando me deslumbraron unas deportivas doradas indescriptibles de una de las muchas  turistas que estaba recibiendo la ciudad ese puente, aunque por un momento pensé que habíamos aterrizado en el imperio Nipon, porque lo único que veía eran japoneses, Liacice me sacó de dudas cuando "la inglesa que lleva dentro" la hizo comentar: 

"El autobusero dice que espik inglis very well, alguien debería decirle que trii pipol es árbol gente y que eso es lo que están entendiendo las japonesitas que han pagado dos billetes y no tres"... 

Pasó un rato y llegamos: ¡Por fin! La estatua de Isabel y Colón.

Cómo descubrimos la ciudad y la disfrutamos en otra entrada a no tardar. 


Comentarios

  1. Esto es como ver una serie y la redifusión XDDDDDDDD

    Ains señor, qué risa. :P

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  2. Jajajaja....Bettie, la siguiente entrega será algo más formal :P .Tal cual lo vivimos, la cual lo contamos XDDDDDD (Gracias por comentar)

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